Acerca de mí

Conoce mi historia y mis creencias
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El mundo que creamos es un proceso de nuestro pensamiento, no lo podemos cambiar sin antes cambiar nuestro pensar.

Albert Einstein

Físico

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Aroldo
Jiménez Covarrubias

Autobiografía

Un poco de mi historia

Mi nombre es Aroldo Jiménez Covarrubias, Nací en el verano de 2003, un 11 de agosto en la Ciudad de Montemorelos, N.L.Mi niñez se desarrolló en una familia muy extensa por ambos lados, soy el menor de dos hermanos, tuve la fortuna de crecer dentro de un ambiente cristiano, desde bebe asistí a clases donde me enseñaron las historias bíblicas, las creencias y fundamentos de la Iglesia Adventista del séptimo día, hasta hoy sigo aprendiendo y desarrollando valores y principios que han forjado mi vida, participando en el desarrollo de los niños y ofreciendo a Dios mis conocimientos en los servicios que ofrece la iglesia.

Cursé mis estudios básicos en la escuela Soledad Acevedo de los Reyes, de este periodo puedo decir que fue muy contrastante, por un lado conocía a muchos compañeros que compartieron conmigo la estancia infantil “guardería”, pero por otro me enfrentaba a más de 400 alumnos de preescolar primaria y secundaria, aunque al final el balance fue muy positivo y pude adaptarme para salir bien librado y sin ningún contratiempo.

Mi preparatoria fue un poco incierta y difícil para mí al principio, ya que mis padres decidieron que la estudiaría en el Instituto Valle Dorado, con muy pocos alumnos, sin embargo me considero una persona que se adapta a las circunstancias y en esta ocasión no fue la excepción, al final pude descubrir habilidades de liderazgo que quizá en una preparatoria más grande no hubiera podido desarrollar, hoy puedo decir que nada fue casualidad, Dios tenía un plan, me permitió darme cuenta de que podía ser un líder y descubrir mi vocación, ya que fue ahí en la preparatoria que decidí lo que quería estudiar.

Tuve una infancia normal hasta los 13 años, cuando cursando mi secundaria un acontecimiento cambio mi vida para siempre y nunca pude ver la vida como los demás, la muerte de mi hermana mayor Daniela Jiménez, “Dany” como le gustaba que le dijeran, el 6 de octubre de 2016; fue un día que jamás olvidaré, por muchas razones, ya que no solo había perdido a mi hermana mayor sino también a mi complemento, mi abogada, mi vocera con mis papás, mi amiga, mi vecina de cuarto,  y muchas cosas más; pero con su muerte descubrí aspectos de mí que no conocía y otros que tuve que aprender a desarrollar con la ayuda de Dios y con el apoyo de mis padres y mi familia.

Me considero una persona sensible, tímida, pero a la vez impulsiva, odio que me presionen, me cuesta tomar decisiones cotidianas, disfruto platicar, pero también disfruto la soledad de mi cuarto y mi computadora, así que podría definirme como una persona que tiene la capacidad de adaptarse a las circunstancias que se presenten.

COSMOVISIÓN

A lo largo mi vida he visto como han ocurrido diversos acontecimientos. He observado el impacto que han causado en personas de diferentes generaciones con las que me relaciono. Acontecimientos memorables, aunque también muy trágicos, pero tengo la creencia de que todo lo que ha sucedido, lo que sucede y sucederá, es debido a una razón, todo regido de la mano de Dios. Creo firmemente que Dios es el creador y dueño de todo lo que vemos y recibimos, además de que vivo con la esperanza de que muy pronto Cristo Jesús regresará por segunda vez; por lo tanto considero que el mundo en el que vivimos es efímero, no hay necesidad de aferrarse a las cosas materiales, ni a las vanaglorias que se puedan obtener, porque algún día todo eso ya no importará. Este pensamiento no me limita a esforzarme ni dar lo mejor de mí cada día, porque mientras Dios me dé fuerzas, intentaré hacer todo con excelencia, aunque sin perder la meta verdadera que es llegar al cielo.

Los seres humanos nos decimos ser la raza dominante, porque así lo designó Dios, pero cada vez nos hemos esforzado en ser más autodestructivos con el fin de demostrar nuestra superioridad, debido a que cuando Adán y Eva fueron inducidos a pecar y lo hicieron, desde entonces se corrompieron las bases de nuestro carácter, nos convertimos en seres con una naturaleza pecaminosa; es por eso que creo firmemente que el principal propósito de nuestra vida es modelar nuestro carácter a imagen de Cristo Jesús. Considero que la razón por la cual muchas personas aún sufren o batallan y no han sido llamados al descanso, es porque Dios nos da la oportunidad y el tiempo necesario para cumplir ese propósito.

Los acontecimientos negativos que surgen en la vida de las personas generalmente son atribuidos a Dios, afirmando que Él los ocasiona como castigo para los malos o que simplemente no es tan poderoso para impedirlos; de cualquier forma se busca culpar a Dios, pero yo veo esta situación como el resultado de las decisiones que Dios permite que tomemos, y creo fielmente que nunca nos va a dejar de amar y recibir, pero no va a impedir que las consecuencias de nuestras acciones se vuelvan realidad.

Desde pequeño mis padres me han inculcado, en primer lugar el temor a Dios y bajo ese pilar fundamental me rigen valores como la fe, el esfuerzo y dedicación, el amor a mi familia y a mi prójimo, el respeto por lo que me rodea y por quienes me rodean, y la esperanza de volver a ver a aquellos seres amados que he perdido.

Uno de los fundamentos que se me han inculcado también, es el de reconocer a Dios como dueño de todo, me gusta pensar en Dios como un padre que sin importar lo que haga, las decisiones que tome o los errores que cometa, sin tener una perspectiva de Dios como si fuera un ser autoritario y sin bondad, al contrario, siempre estará para mí.

Mi familia representa para mí, la base de mis principios y valores, además de que son la razón de todo lo que he logrado y lo que puedo lograr, son mi inspiración y lo que me motiva a demostrar que puedo ser mejor. Cómo familia quedamos marcados a raíz de la muerte de mi hermana, y gracias a eso, hemos aprendido a reconocer que el temor a Dios, el amor y el respeto a el prójimo, son las mejores armas en contra de la violencia y la maldad de los seres humanos, y es así como considero que se puede llegar a vivir en un mundo mejor, o por lo menos en un mundo con una mejor calidad de vida.